martes, 18 de diciembre de 2007
Juventud
solamente desembocas,
caes, te vas, enmudeces.
solamente te vas,
como hija del tiempo
solamente enmudeces,
con tu aire instintivo
de belleza. Frágil como la vida,
fuiste fugaz eternidad, juventud.
viernes, 7 de diciembre de 2007
Desesperanza poética
haber nacido en un mundo de pérdidas y ansiedades,
ser para nada, un lamento en la noche sola, acaso
un abrazo verdadero que nos redima de tantas puñaladas.
La muerte a cada paso, en la respiración, en el vientre,
en el corazón advertido de entierros familiares, en la suerte
que nos depara la ceniza, la ceniza con su sentido de polvo enamorado.
Haber vivido con la esperanza a cuestas y comprender, lleno de sombras, su pérdida,
el vacío, la desolación del tránsito sin nadie. Sin amigos, sin aliento, sin mañana.
lunes, 22 de octubre de 2007
Réquiem
Morir, dejarlo todo, abandonar el sufrimiento a través del sufrimiento. El paso de la vida a la muerte, antes y después, el deseo agonizante del espíritu, las sombras de la conciencia, la imperfección más pura, toda la realidad en evidencia a lomos del escepticismo, el dejar de saber, el no comprender el fenómeno de la vida y la otredad. El silencio, la calma tras la agonía, la búsqueda que halla el letargo que nos arrastra, el rayo de la carne buscando a la carne, las últimas guaridas del hombre embarcado en su destino, el golpe de vida, la ilusión taciturna del romántico que navega por su trascendencia, el surco del corazón en busca del alma.
La distancia del que nada posee ni a nadie, tan sólo a su misterio. El cántico espiritual de la tristeza, la alegría, el dolor… esa búsqueda sublime que nos hace perennes en la impermanencia. El abismo de la vida, cultivado de quimeras y visiones, la pobre esperanza del que espera el olvido eterno. Sueños de abandono, renuncias flacas y despertares imposibles, abrazo, abrazo fraternal de comprensión.
Morir, dejarlo todo, abandonar el sufrimiento a través de la desdicha divina del ciclo último, perder el aliento en la emoción plena de la posibilidad. Acertar en el rito de la despedida, aquel que anuncie la elección del corazón fatigado de esperar. Cerrar la puerta, abrir la vida verdadera, la senda intransitable de la esperanza.
Vivir, acechar la respuesta del susurro, despertar, sí, despertar por fin contra la innata pulsión de la supervivencia. Entregar el alma a lo posible, a lo venidero, a lo inescrutable. Quedarse quieto, mudo, insólito ante el nuevo amanecer. No arrastrar las desvencijadas siluetas de un pasado perdido, absorber el futuro en un estado de calma desplegada, resurgir del océano tras el naufragio de la existencia, resurgir amando la naturaleza impropia, la inoportuna necesidad del hambre y la sed. Abandonar el alimento en busca de la verdad del alma.
Salir del samsara una y otra vez, alentando al corazón, el goce de lo humano, la respiración. Perderlo todo, la frágil conciencia, la perpetua consciencia, el árido devenir, la fatal ilusión, el calor. Llegar a la luz última, al frío del camino elegido, el del abandono, la renuncia, el del clamor constante del existir sin existencia.
jueves, 6 de septiembre de 2007
Llegada
miércoles, 29 de agosto de 2007
lunes, 27 de agosto de 2007
Alegoría del Sol (I)
El calor del alma es un influjo que sobreviene del Cielo.
El Cielo existe en el Espíritu. En el aliento.
Todo el dolor crece como el Sol, toda la felicidad es su reflejo, la Luna.
Hiperión todo lo observa. Está ahí para saber.
La felicidad es el conocimiento del Alma.
El dolor es el deseo y la ignorancia. Buda es el camino
que nos aleja del fatum o karma. La idea de querer ser Dios es el infierno del dolor.
martes, 21 de agosto de 2007
El viejo Siddhartha
De tanto naufragar su corazón fue tomando la apariencia del hielo. Todo el calor del mundo estaba lejos de sus brazos, cansados de abrirse a la nada. Ahora busca el sagrado Om, al igual que el viejo Siddhartha. Ahora deja caer su cabeza en el río para ahogarse de inmortalidad, para rozar el vértice sagrado de los peces, para sucumbir en el agua de brahmanes acuáticos llenos de luz. Pero le falta el aire y no prosigue el curso del río, sus pies se nutren de lo inmóvil y nada avanza, ni la suerte, ni la fe, ni el sagrado Om, que ya se parece a un grito hueco de orfandad. Amenaza con volver al río, y no sabe lo que significa nadar contra la corriente. Amenaza su naufragio. Sin épica. Sin regreso. Ya todo se va, su espíritu hecho de anhelos, su mirada de búsqueda, su inmensa vacuidad, el vago resplandor de su conciencia. Ya todo se va, el río transporta ruinas de aire, cabellos canos y dorados, manos agitadas, piernas lentas y fugaces. El río se lleva al que fue un día todo lo innombrable, todo lo inmortal… el uno todo de lo eterno. El río se lleva una sombra hecha de cuerpo y de soledad.
lunes, 20 de agosto de 2007
Durante mucho tiempo
Se ha despertado temprano y ha viajado una vez más por el sueño de después. Huele a cenizas y el amanecer parece escarcha, los ojos entreabiertos respiran todavía la penumbra, la voz muda la conciencia o lo que quede de ella. Se humedece el alma de recuerdos, de las noches de ayer y de mañana, de lo que falta para que el corazón culmine sus horas. Es todo una prisión, salvo la esperanza.
domingo, 5 de agosto de 2007
Respiración
un segundo y es el alma quien habla en la noche
te dice que has llegado mientras
posas las manos sobre tu vientre
has llegado a ti mismo
y al fin
puedes respirar
Sigue el ritmo del aire
sigue la vida el curso que promete
y tus ojos cerrados ya no se abren
porque siguen el curso de la muerte
viernes, 8 de junio de 2007
Silencio oído
La voz tranquila de mí mismo es mi silencio,
se mueve sola y yo sonrío al tocarla.
lunes, 4 de junio de 2007
Bohemios
qué difícil es pasearse por las calles y reírse por dentro de los demonios de allí afuera
qué difícil de sobrellevar es la locura fría del hombre cuerdo
qué difícil lo tendría Baudelaire
en este siglo XXI
El ser sensible del siglo XIX+2
La insensibilidad no duele, acaso sí. La insensibilidad puede rozar la sensibilidad de un ser sensible y hacerle sufrir. La insensibilidad sensibiliza. Pero lo sensible puede revolcarse, volver desensibilizado. El golpe es mortal. Adecuado. Necesario para la vida. Pero doloroso. El ser sensible es aquel que tiene tiempo para morir.
Pero el ser sensible también vive el mundo y por eso, aprende a desensibilizarse del mundo, para agarrar todo el pragmatismo tan necesario de nuestro tiempo si se desea sobrevivir. Las sociedades imponen su razón y el hombre las acata porque es su deber como hombre aunque sin un sentido nacido individualmente sino como consecuencia nada más que de su carácter. Unos sobreviven, otros sucumben. Algunos equilibran y sitúan al arte, pensamiento, humanidades, etc, como el simulacro de su vida. También es un simulacro la televisión e Internet, es decir, todo lo que nos dé vida para continuar con la muerte. Nos hemos acostumbrado a quitar trascendencia a la vida y ver su discurso trascendente sobre etiquetas estéticas, bien modeladas, quizá para que nos hagan menos daño.
Los jóvenes tienen un teléfono móvil. Esta afirmación es casi una regla. Ellos lo han inventado, esto es, sus necesidades. Los jóvenes tienen Internet. Ellos lo han inventado, es decir, sus necesidades. Nada tiene una sinrazón, todo tiene un porqué. La tecnología busca calmar el alma así como la cultura. Pero, ¿cómo?, ¿tienen alma los jóvenes?
Quizá no interese la propuesta. Quizá interese la seguridad del superhombre, el dolor teatralizado y la muerte pospuesta. La vida se convierte así en un dejar para luego lo más importante, y el alma, esa que no existe, deja totalmente de existir, quemándose en las cenizas de su silencio.
¿Por qué tanto pesimismo?, ¿Cuál es la razón de ello?, ¿Una necesidad posmoderna?
Sólo un consejo. El arte cura pero su curación no es pragmática. Dicen que una lágrima es mejor que esconder el sufrimiento, pero ¿es acaso el arte una lágrima que sale de nosotros? El arte reconoce la imposibilidad. El mundo posible es un eco que sólo podrá ser mirado con optimismo por los ojos de un Sancho Panza quijotizado. Es decir, el loco es el cuerdo y su cordura es la razón de su sufrimiento. Hay siglos de soledad, siglos como el nuestro. Hay siglos en que todo lo oscuro de su pasado sirvió para mostrar la evidencia de que hay juegos reales que han perdido su razón de ser. Juguemos al simulacro, inmolémonos sin ser verdaderamente nosotros, hagamos lo que somos, pero sin ser.
lunes, 28 de mayo de 2007
Sobre la novela
Difícil tarea, la del novelista.
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La peor locura de todas
es la que se presenta
desde una extrema cordura.
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La verosimilitud perjudica la estética.
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El verdadero misterio es que lo irracional, el Arte,
pueda ser razonado mediante fábulas y mitos.
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Novela que acusa los pecados de la novela.
Imposibilidad textual, vida
miércoles, 23 de mayo de 2007
Right in two
Apagó la linterna. Pensaba en fábulas sin moraleja. Sus ojos se cerraron solos, después los abrió, atento, impidiendo la despedida. Encendió la linterna. Dejó de pensar en nada. Escuchó la voz de una joven mujer bajo los escombros. Él no quiso dar sentido a aquellas palabras de socorro. No interpretaba los signos de la asfixia y los confundía con el miedo. Su propio miedo.
lunes, 21 de mayo de 2007
Fragmentos de historia y lirismo
La historia está hecha de anécdotas. Esas poco se escriben pero mucho se habla de ellas. Las anécdotas son la sal de cualquier plato insulso. Aunque la ciencia impone que nos alejemos de ellas. Lo que antes, en el positivismo, la anécdota hablaba de una parte del Espíritu, ahora, el neopositivismo ha trasladado todo fenómeno emocional como algo extrínseco a la materia de conocimiento. Vivimos así el siglo de los sucedáneos, del triste y tímido desconsuelo erudito.
El fin nos salva de las consecuencias cuando éste no tiene principio.
viernes, 18 de mayo de 2007
Curso de verano de la Universidad Complutense (El Escorial). Semana del 23 a 27 de julio de 2007
HISTORIA DE ESPAÑA CONTEMPORÁNEA, SUS TEXTOS Y PALABRA
Código: | 75106 | |
Fecha : | Del 23 al 27 de julio | |
Director: | José Manuel Martínez, director de Barcarola | |
Secretario: | Carlos G. Navarro, gestor cultural | |
Coordinadora: | Antonia Cortés | |
Área: | Comunicación | |
Colaboran: | Escuela de Periodismo y Comunicación; Fundación AUNO | |
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Presentación: Los acontecimientos más reseñables que marcan la historia de España contemporánea no sólo son aquellos que han supuesto un punto de inflexión en el tiempo, en la memoria, y han fluctuado como ríos en un periodo acotado por fechas determinantes y hechos acaecidos que en gran medida marcan y registran el sentir colectivo, también son las puntuales situaciones que han quedado plasmadas, mediante la acción de la escritura, en las miles de páginas de textos que contribuyen a hacer más preclaros, y objetivos, los conflictos de pasados siglos. Esta iniciativa consiste en examinar no las grandes estrategias o movimientos, sino panoramas y semblanzas de personajes puntuales cuyo acontecer ha quedado plasmado en el acta notarial de la historia, bien en arriesgada literatura o en textos recopiladores que se han ocupado de incluir tanto problemas recientes como de antaño. Todos los nombres y temas evocados, así como los debates, tienen algo en común, es el de haber querido decir, escribir o captar la emoción o tristeza que nos suscitaron acontecimientos de nuestra historia, intentando reflexionarlos exhaustiva y libremente, buscando, tanto en las conferencias como en los debates, si no cerrarlos definitivamente sí añadir más luz a su esclarecimiento.
PROGRAMA:
LUNES, 23 DE JULIO
10.30 h. Inauguración
Lectura de poemas y textos: José Sacristán, actor
12.00 h. Santos Juliá, historiador
Las dos Españas
16.00 h. Mesa redonda: Dos Españas: ¿irreconciliables?
Participan: Santos Juliá; José Sacristán; Andrés Sorel, escritor
MARTES, 24 DE JULIO
LA HERENCIA DEL SIGLO XIX. REPERCURSIÓN EN EL SIGLO XX Y XXI
10.30 h. Fernando García de Cortázar, historiador
Mitos y perdedores
12.00 h. Ricardo García Cárcel, historiador
Constitución y la 1ª República
16.30 h. Mesa redonda: Una nación indomable: Perdedores “héroes” de la bohemia
Participan: Fernando García de Cortázar; Ricardo García Cárcel; Juan Manuel de Prada,
escritor
MIÉRCOLES, 25 DE JULIO
SIGLO XX: REPÚBLICA Y GUERRA CIVIL. CULTURA
10.00 h. Andrés Trapiello, escritor
Las armas y las letras
16.30 h. Mesa redonda: La cultura en conflicto
Participan: Andrés Trapiello; José Esteban, escritor y editor; Isabelo Herrero, presidente del
Partido Republicano
JUEVES, 26 DE JULIO
SIGLO XX: II REPÚBLICA Y GUERRA CIVIL. VOCES ACALLADAS
10.00 h. Félix Grande, escritor
Aspectos de García Lorca y el Flamenco
12.00 h. María Antonia Iglesias, periodista y escritora
Los maestros en la República
16.00 h. Mesa redonda: El compromiso de los intelectuales
Participan: Félix Grande; María Antonia Iglesias; Juan Bravo, Universidad de Castilla-La
Mancha
VIERNES, 27 DE JULIO
10.00 h. Diego Carcedo, periodista
Exilio y ayuda exterior (Brigadas Internacionales)
12.00 h. José Manuel Caballero Bonald, escritor
La memoria perdida
13.00 h. Clausura y entrega de diplomas
miércoles, 16 de mayo de 2007
La luz imposible
I
La luz nos encadena, imposible,
a las visiones.
La luz nos dice sus temores
y nos ciega.
II
La luz nombra, rompe lo oscuro,
nace en el día de la nada.
Toda ella es memoria, conciencia,
desaparición.
La luz borra, imposible,
la noche eterna.
lunes, 14 de mayo de 2007
Búsqueda ingrata
en la noche íntima y blanca de luna,
te busqué en la impaciencia y en la calma,
en la lágrima y en la sonrisa convencida,
te busqué en el dolor y más allá de sí:
en la alegría.
Bebí grandes vasos de vino para alargar
la alegría. Pero pronto llegó la resaca y tú
más nunca apareciste.
jueves, 10 de mayo de 2007
Salvación de los sentidos
jueves, 3 de mayo de 2007
Despierta!
Despierta! Un pobre loco, en la periferia, se ha expulsado al vacío desde las alturas de una azotea. Las chimeneas huelen a sangre.
Despierta! Los príncipes van a la guerra como en los siglos pasados, aquellos de la barbarie. Creen que la gloria les acompaña. Príncipes de Ralph Lauren y de metralleta.
Despierta! Los muertos no son reales en Youtube, el sonido de la bala es un audio que recorre megabites de espanto. Las cadenas de televisión lavan la mierda de las conciencias entre anuncios de rebajas de perfumes.
Despierta! Los cuervos mastican la espuma de tu silencio. Tu vana misericordia condimentada de salsa de tomate Heinz.
Despierta! No verás el dolor muchas veces en tu vida. Sólo el dolor de otros.
Despierta! No siembres tu reino perfecto a costa de los demás.
Despierta!
Despierta!
Despierta! No crucifiques la esperanza ni busques culpables.
Despierta!
Despierta! No busques la ficción para llorar adecuadamente. No trasformes la lágrima en materia estética.
Despierta! No cabalgues a lomos de la perfección relativa.
Despierta! No mastiques los huesos de tus mártires.
Despierta! No sufras la ira de poetas sin manos.
Despierta! Olvida el juego de las apariencias.
Despierta! No verás nada. Te quedarás ciego. La conciencia no te hará ser un hombre. Sólo la angustia, la impotencia, el dolor, harán de ti un ángel de justicia. Un ángel sin alas, pero ángel.
Despierta! El sueño ha terminado. La realidad no está tan lejos.
Alguien ha muerto en el dolor y en ese dolor tú has nacido.
Despierta!
sábado, 28 de abril de 2007
Akira, sobre héroes y otakus
sábado, 21 de abril de 2007
Sueños
viernes, 20 de abril de 2007
Cho Seung-hui: la masacre de Virginia y un verdugo
Dicen que estas cosas sólo pueden ocurrir en los Estados Unidos de América. De hecho, la lista de asesinos de masas en EE.UU cuenta con una larga y penosa tradición. Cuando una tragedia de estas ocurre la sociedad por unas semanas reflexiona sobre sí misma, ya que el enemigo está dentro, se ha educado en el Estilo de Vida legitimado e idealizado. En los EE.UU el discurso, sin embargo, autocrítico es limítrofe, yo diría que inexistente.
En el caso de Cho Seung-hui, este ciudadano norteamericano originario de Corea del Sur, es destacable que estudiase filología en una prestigiosa universidad. Pero, evidentemente, cabe dudar de la calidad literaria de sus relatos. Y lo más conveniente sería publicarlos cuanto antes evitando una cierta mitificación por parte de jóvenes estadounidenses sensibilizados con su actitud. Creo, y esa es mi visión del asunto, que el problema fundamental de todo esto es precisamente el peligro de que se convierta en mito, por la realidad traumática que proyecta en la sociedad, un comportamiento semejante. Conseguir un arma en Estados Unidos es mucho más fácil que en Europa, pero no olvidemos que en Europa, recurriendo al tráfico ilegal, también pueden conseguirse armas si realmente se desea. Considero que ese no es el problema sino exclusivamente la mente, la psicología del asunto. Y esta psicología está estrechamente unida al estudio de la psicología social norteamericana. Lean “American Psicho” y descubrirán a un escritor que podría haber sido tachado de psicópata en potencia. ¿Hemos de condenar esas obras, a esos escritores? Evidentemente no. ¿Hemos de condenar entonces a la sociedad hipócrita que suscita esos relatos? Evidentemente tampoco.
No es de extrañar que los dramas teatrales de Cho Seung-hui no pasen jamás a la historia de la literatura, pero es que, aunque realmente fueran obras maestras de la literatura y se valorase la obra creativa de un asesino en ningún caso podría justificarse su actitud social. Por suerte Baudelaire no terminó matando a un grupo de parisienses que paseaban por algún bulevar. Y si lo hubiera hecho hubiera cumplido su condena social aunque literariamente hubiera recibido otro tipo de justicia.
Lo único que queda sin justificación es el asesinato real: el que esparce su sangre por el suelo de una institución del saber, como es una universidad, en este caso la de Virginia. Las manos manchadas de sangre de un ser cuyos únicos relatos fueron la cobardía de matar.
Relatos injustificables de un verdugo que no aprobó el examen humano de la vida.
jueves, 12 de abril de 2007
La cultura del consumo y los centros comerciales
Señala Ortega en “La rebelión de las masas” que “el mundo, de repente, ha crecido, y con él y en él la vida”. Es una evidencia que el crecimiento demográfico entraña una de las características del siglo XX y lo será del XXI. Todo tiende a globalizarse, queramos o no. Los centros comerciales son un ejemplo de ello: son todos iguales. Eso significa que el hombre tiene las mismas necesidades y gustos. Es arriesgado hablar de necesidades en la cultura del consumo, ya que ésta, casi siempre, redunda en lo innecesario. Sigo con Ortega: “La actividad de comprar concluye en decidirse por un objeto; pero, por lo mismo, es antes una elección, y la elección comienza por darse cuenta de las posibilidades que ofrece el mercado. De donde resulta que la vida, en su modo «comprar», consiste primeramente en vivir las posibilidades de compra como tales. Cuando se habla de nuestra vida, suele olvidarse esto, que me parece esencialísimo: nuestra vida es, en todo instante y antes que nada, conciencia de lo que nos es posible. Si en cada momento no tuviéramos delante más que una sola posibilidad, carecería de sentido llamarla así. Sería más bien pura necesidad.”
miércoles, 11 de abril de 2007
martes, 10 de abril de 2007
Destino literario
domingo, 8 de abril de 2007
Los centros comerciales o el aire puro del hombre posburgués
sábado, 7 de abril de 2007
Brick
El actor principal es Joseph Gordon-Levitt ("Misterius Skin", "Letter Days") y en mi opinión su interpretación es sobresaliente, sin duda dará mucho que hablar este actor.
Lo único negativo, a mi entender, es que cae en ocasiones en algunos tópicos argumentales de este tipo de películas, pero, en general, este pequeño defecto se disculpa porque el director, Rian Johnson, ha conseguido unos notables resultados técnicos y estéticos.
ME ha encantado el ambiente captado (una atmósfera casi surrelista y enrarecida a medida que avanza el film), la música muy bien escogida y la interpretación original de los jóvenes personajes. Se nota que hay un director con talento propio, y no vendido a la industria, detrás de esta cinta.
Por tanto, la recomiendo encarecidamente, si usted desea pasar un rato intrigado, sin preocupaciones metafísicas, solamente con la curiosidad a flor de piel. ¿Qué está pasando?, ¿qué va a pasar?, ¿qué ha pasado?. Esas son las preguntas que con más frecuencia fluyeron por mi cabeza. Pero, a fin de cuentas, creo que lo más importante en este film no es lo que pasa sino cómo pasa, sin duda el director lo ha conseguido.
BRICK, Brian Johnson. (USA, 2005)
Ver ficha en Imdb - FilmAffinity
viernes, 6 de abril de 2007
Pecado original
El hombre odia por temor a no ser amado.
La peor amenaza formulada en
jueves, 5 de abril de 2007
Un voto en blanco
Una famosa página de Internet dedicada al cine, cuyo nombre es IMDB (Internet Movie Data Base), dispone de un “Top 250”, esto es, de una lista o canon de las 250 supuestas mejores películas de la Historia del Cine según los visitantes de la web. Cada película tiene incluso una puntuación determinada, que es la media aritmética resultante de cada valoración por usuario. Así, la mejor película de la Historia del Cine, a día de hoy, es “El Padrino”, con 204,392 votos y una nota media de 9’1 sobre 10.
Resulta interesante observar los gustos de los lectores, ya que representan, por el gran número de votos que se efectúan, al público del cine en general, y ver cómo estos simpatizan o reniegan de las películas. Esta página web recoge, o desea recoger, todas las películas existentes en el mercado y para todas ellas se ofrece la posibilidad de efectuar un voto por usuario, previamente registrado.
Este “Top 250”, a mi entender, como digo, representa un gusto popular, no especializado, con el que cabe la posibilidad de atender a la recepción del cine en el público, y no, como en otras ocasiones se hace, en los subjetivos, limitados y constreñidos críticos de turno. Pero, desgraciadamente, si repasamos el “Top 250” tampoco podríamos quedar muy conformes con el resultado general, absurdo en muchos casos, afectado por películas mediocres sublimemente valoradas (El Señor de los Anillos: 8’8, Star Wars: 8’8, Rocky: 7’9, etc.)
Sin embargo, no por esa razón conviene despreciar este “Top” tan disparatado, incoherente y complaciente con la Industria. Cabe analizar los gustos generales, el porqué de este tapiz extraño donde “Terminator”, protagonizada por Arnold Schwarzenegger, Gobernador de California, tiene la misma nota que “Manhattan” de Woody Allen. Sin duda son públicos distintos los que votan a una y a otra película, ya que no cabe en ninguna cabeza que una misma persona pueda amar las dos películas por igual. Aunque eso sería muy posmoderno, por otra parte.
Ya no se puede decir aquello de que la sabiduría popular nunca se equivoca. Esta lista es la prueba del desequilibrio estético de nuestro tiempo. De cómo lo más sublime puede estar cerca de lo más banal e intrascendente. El ser humano es así: proteico, vario, disímil, absurdo.
Pero no hay que precipitarse en juzgar esta situación como una gran tragedia, sino, mirándolo bien, como una parodia de que lo somos o de lo que el arte nos hace ser. Los hechos nos revelan la parodia que nosotros mismos hemos creado de lo que somos.
Es, por tanto, el arte, en este caso, el cine, un espejo de nuestra mediocridad. Pero también de nuestra grandeza. De nuestras limitaciones, pero también de nuestro espíritu sensible.
Finalmente este espejo puede volverse contra sí mismo y legitimar lo mediocre. Seguro que más de alguno se ha decidido a ver determinada película por la buena nota que recoge en esta página; y, por otro lado, ha dejado de ver otras porque su nota no es tan buena. Este es el problema de la subjetividad y la desorientación, también el problema de la pasividad o del dejarse orientar por miedo a pensar por uno mismo. O, simplemente, porque no hay tiempo ni ganas para ello.
A fin de cuentas somos lo que vemos. Vemos lo que creemos que somos. Y no vemos lo que creemos que no somos. No hay, sin embargo, la posibilidad de desilusionarnos, pues, afortunadamente, todos tenemos la posibilidad de votar, pero sí, admitiendo que nuestro voto pueda perjudicar al prójimo. Ese es el gran conflicto: la pérdida de la legitimidad. De nuestra auténtica y necesariamente defendible legitimidad.
martes, 3 de abril de 2007
Oscuras previsiones
¿Podría el ser humano aprender a devorar sin conciencia alguna, haciendo que sus semejantes sigan su ejemplo convirtiéndose éste en un paradigma de la moralidad?
¿Puede un hombre conducir a un abismo perpetuo a toda la Humanidad?
La Naturaleza nos vuelve pragmáticos y mediocres al dotarnos del instinto de superviviencia. Todo instinto es una lacra que conduce a la voluntad, la cual pervierte y devora.
¿Puede el hombre arrastrarse en el fango, contaminar todos sus instintos, construir una moral edénica de excrementos?
¿Podremos liberarnos de la conciencia para que salga el Sol sin que nadie lo observe y la luz irradiase como una ceguera y nuestra piel fuese sensible a su influencia?
¿Podría el hombre sin conciencia hablar a Dios sin hablarle, desde lo oscuro, devolviéndole sus cielos: haciéndole, silenciosamente, la Revolución?
Sería el silencio, la retirada perfecta. El cinismo engendrando instintos autodestructivos. El drama de una evolución humana sin conciencia.
domingo, 25 de marzo de 2007
La metafísica y los suburbios
“Los filósofos se han limitado a interpretar el mundo de maneras diferentes; ahora lo que importa es transformarlo”, escribió Karl Marx en tiempos de grandes desigualdades sociales. El mundo, evidentemente, se transformó, pero “interpretando” a su modo el cambio: limitándolo a la mediocridad humana. El poder de la palabra lleva consigo el poder de la acción: el movernos hacia ella. Pero, ¿cómo armonizar acción y conciencia, poder y bien?, ¿cómo lograr que todos los principios de la acción humana estén supeditados a una virtud ética: a una especie de imperativo categórico o “perfecto” actuar?
¿Perfecto? Disculpen, estábamos hablando del ser humano.
Les contaré una historia. En un lugar de la antigua Unión Soviética una adolescente sueña con irse a América a vivir para dejar la pobreza y miseria de su tierra, donde apenas puede sobrevivir. Su mejor amigo, un niño, se plantea suicidarse para perderse de la triste realidad y también, por el mismo motivo, se droga con pegamento. Estas son algunas líneas argumentales de “Lilja 4-ever”, una película de Lukas Moodysson del año 2002. Son ciento nueve intensos minutos, llenos de esperanza y desesperanza y de un realismo crudo propiciado por los resquicios de un sistema comunista que fracasó.
La joven Lilja, de 16 años, se ve obligada a prostituirse para poder sobrevivir en su país. Después viaja a Suecia creyendo que allí le espera una vida mejor, así se lo promete su presunto novio: pero éste no es más que un impostor. Todo resulta una farsa y Lilja se ve convertida, en Suecia, otra vez en prostituta, pero esta vez como esclava de una mafia. No les contaré el final: tan sólo decirles que no termina bien. ¿De qué otra manera podría terminar?
Posiblemente este tipo de historias sucedan todos los días. Siempre que exista pobreza y miseria estas cosas ocurrirán porque “el hombre es un lobo para el hombre” y siempre los más fuertes se comen a los más débiles.
En el caso de la prostitución la mujer, y también el hombre, queda convertida en mercancía, en objeto de consumo, en un servicio más para el consumidor. Cuando la prostitución es ilegal siempre pierden los débiles ya que sus derechos quedan vulnerados y no tienen posibilidad de reclamar su dignidad. Pero cuando la prostitución es legal, como en Holanda, ¿entonces, qué? Sin duda esta pregunta conlleva un delicado cuestionamiento.
La prostitución ha existido siempre, ya en la sepulta Pompeya se pueden observar las pinturas de prostitutas en los lupanares. El negocio del cuerpo como objeto de placer siempre ha sido y será rentable. Y en una sociedad enferma este negocio no es más que un reflejo de la enfermedad del hombre mismo, de su conciencia y moral pervertidas.
Pobreza y riqueza, cultura e incultura. Dos cuestiones importantes.
El mundo cierra los ojos a la explotación de sus semejantes. La justicia y la policía actúan por inercia: pero todos sabemos que mucho más se podría y debería hacerse para terminar, de una vez por todas, con los grandes sometimientos humanos que acontecen todavía en el siglo XXI.
Pensar soluciones a este tipo de injusticias tal vez pueda convertirnos en ilusos, en benditos idiotas que no comprenden, aún, cómo funciona el mundo. Pero merece la pena ser un bendito idiota. Aunque es necesario algo más que eso para cambiar las cosas. Es necesario actuar. Quitar la razón a este sistema que parece habernos condenado al silencio por un puñado de euros que va a parar a los centros comerciales. Al consumo. A la demencia del “tener” por encima del “ser”. El “ser” mediocre es aquel que reconoce al dinero como su cualidad metafísica más importante. ¿Qué es el hombre sin dinero, entonces? Sencillamente, no es.
lunes, 19 de marzo de 2007
Baudrillard o la metarrealidad
jueves, 15 de marzo de 2007
Escritura ontológica
El acto trascendente viene marcado por el hecho de escritura. No puede decirse que todo hecho de escritura se realice en una especie de nirvana, sino que todo escribir sitúa al ser más allá de sí, en un relato al que darle forma al ser: es, de hecho, una actitud metafísica. La calidad de la obra, del texto, podría medirse, en base a este criterio, según la virtud metafísica mostrada. La experiencia de la lectura es la que aporta los criterios y valora la trascendencia de la obra.
martes, 13 de marzo de 2007
Blogs y poesía
viernes, 9 de marzo de 2007
Ética y moral
Una de las obligaciones éticas más importantes es “no matarás”. Obligación ética en tanto que pasa al entendimiento del individuo y obligación moral en tanto que el individuo la acepta con el fin de preservar la convivencia con sus semejantes humanos. Por eso, otra de las obligaciones éticas más importantes es “ser feliz”. Algo que la moral no se atreve a aceptar pues ha de preservar cierta libertad al individuo.
Las normas morales, que repercuten en el sujeto ético, han sido recogidas en leyes, mandamientos, salmos, etc. Todo eso forma parte de la civilización, recordando a Max Weber, mientras que la cultura recoge las aproximaciones éticas, o búsquedas de unos fines del individuo desde “sí”, desde su entidad abstracta y cultural. La cultura es el arte. Es el pensamiento.
La ética es carácter, voluntad de ser, la moral es costumbre, voluntad aprendida. Pero ambas palabras están muy cercanas, recogen un mismo problema que gira en torno al Tú y al Yo, pues la individualidad no puede completarse sin el Tú, así como la Comunidad no puede reafirmarse sin sus Individuos.
La tendencia hacia el mal deviene de la voluntad libre del individuo que traspasa las fronteras de lo moral. El libre albedrío opera en la conciencia y en los instintos del hombre. La cultura tiende a acentuar el carácter de la conciencia por encima del de los instintos. Dirá Dostoievski que la mayor enfermedad es la de la conciencia.
“Yo amo a quien castiga a su dios porque ama a su dios”. Dijo el Zaratustra de Nietzsche. Nuestra civilización ha dejado ejemplos históricos que ilustran esta afirmación. Todavía hoy el problema es un hecho, aunque la palabra “dios” podría sustituirse por cualquier cosa. También dijo Zaratustra: “Debéis tener solo enemigos que haya que odiar. Pero no enemigos que haya que despreciar, es necesario que estéis orgullosos de vuestro enemigo.” ¿Es, acaso, esta máxima un principio ético? Al menos, se plantea como tal, pero la lectura es múltiple. Como ya he señalado la conciencia es la protagonista de su libertad. El individuo fundamenta sus valores éticos en la cultura, por ejemplo en la Filosofía. Su “ethos” tiende al equilibrio, o al menos, requiere de él. Pero la entropía es siempre el comienzo, el desorden, el caos.
Si reflexionamos en torno a la ética y la moral hemos de preguntarnos primeramente quién reflexiona. La conciencia parte de uno mismo (el individuo) y sólo en sí misma se completa.
Terminaré con otras palabras de Zaratustra, para ilustrar mi convicción del problema que planteo: “Pues, hermanos míos: ¡lo mejor debe dominar, lo mejor ‘quiere’ también dominar” Y donde se enseña otra cosa, allí ‘falta’ lo mejor”.
La ética es voluntad, y la moral es la imposición de un querer dominar la ética. La moral se superpone a ella: limitándola y obligándola a exceder los límites de su conciencia.
domingo, 4 de marzo de 2007
La batalla interior
Como una flor encencida llegaste al ocaso.
Después vino el sueño prolongado que produce el cansancio,
volver a despertar: de nuevo la promesa,
la batalla interior, inacabable, de la esperanza.
jueves, 22 de febrero de 2007
Cansancio del que ya no camina
"Soy las huellas que ya he pisado".
Un resplandor a lo lejos confunde
los pasos derruidos del que una vez fue,
pero ya muere, entretenido, lejano de sí,
en la más pura incertidumbre del silencio
aquel soñador que nunca despertó de la derrota.
martes, 13 de febrero de 2007
Reiki
viernes, 9 de febrero de 2007
La condición pragmática
Se han puesto de moda los libros canónicos, esos que se titulan así: “Las 1001 mejores películas de todos los tiempos” o “Los 1001 mejores libros” o “Los 1001 mejores discos”, etc. Está claro que la cultura se puede catalogar, clasificar por géneros, años, orden alfabético… Pero todo esto viene de mucho antes, desde la historia misma de